La manta ignífuga o manta antifuego es ideal para sofocar incendios pequeños, comúnmente, en laboratorios y cocinas. Tiene propiedades ignífugas y se fabrica de acuerdo con las normas CE y EN. Viene con un estuche que se puede montar en la pared.
La manta se puede utilizar junto con los extintores de polvo seco o extintores químicos húmedos para lograr una mayor eficiencia contra incendios.